Mostrando entradas con la etiqueta Parque Gezi. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Parque Gezi. Mostrar todas las entradas

miércoles, 12 de junio de 2013

7.- Estado de excepción encubierto


En Turquía se está viviendo un estado de excepción.  No se ha declarado porque estamos en 2013 y no en la década de los 70. La policía ayer no entró en Gezi provocando una matanza porque estamos en 2013 y no en la década de los 70. Los abogados detenidos, así sin más solo por apoyar la causa de los acampados en Gezi, no fueron torturados y solo se les infundió miedo soltándolos al cabo de unas pocas horas porque estamos en 2013 y no en la década de los 70. El gobierno anuncia que se ha creado una comisión para encontrar una solución al Parque Gezi, una ‘comisión inteligente’, pero el mismo día que lo anuncia acorrala el parque con gases lacrimógenos e intenta forzar a la gente a que abandone el parque. El término ‘grupos marginales’ es usado ya sin pudor y las imágenes que vimos el fin de semana de solidaridad y buen entendimiento en la plaza de Taksim abarrotada por los istanbulitas han quedado ya atrás en nuestras retinas. Mientras, el RTÜK (Consejo Superior de Radio-Televisión), según la información publicada hoy en Hürriyet, ha decidido multar a Ulusal TV, Halk TV, Cem TV y Em TV (pequeños canales que ofrecieron imágenes de las protestas el primer fin de semana) ‘por violar los principios de emisión y hacer programas con contenidos que pueden dañar el desarrollo físico, mental y moral de niños y jóvenes’.



Ya hemos entrado en la segunda semana desde que empezó la acampada inicial en el Parque Gezi. Y el Primer Ministro ha demostrado que no cederá ante la gente que aún sigue concentrada en el parque. De hecho, la vuelta del Primer Ministro a Turquía significó la puesta en marcha del aparato estatal y del mismo partido para montar mítines improvisados y hacer anti-propaganda. Para concentrar a mucha gente se facilitó la comunicación y se fletaron servicios de autobuses que partían desde variados puntos de la ciudad y en algunos casos, como el de Estambul, se mantuvo abierto el servicio de metro hasta las 4 de la noche. De forma similar se potenciaron esos mítines con la instrumentalización del ‘odiado’ twitter  y se crearon hashtags en apoyo al Primer Ministro que por dos días eclipsaron los trending topic del movimiento de resistencia. Los discursos de Erdoğan fueron agresivos, amenazantes y especialmente repetitivos.

En los discursos de Erdoğan, analizados en la anterior entrada de este blog, Incluso se hizo varias referencias a lo que el Primer Ministro denominó el lobby de interés que podríamos entender como 'lobby especulativo'. El uso de este término sorprendió a los medios que al día siguiente empezaron a debatir sobre qué se refería el Primer Ministro y sobre si existía o no tal lobby. Lo cierto es que a cada discurso agresivo de Erdogan la bolsa se desplomaba y su respuesta fue esa, culpar de ello a dicho lobby y afirmar que él no iba a perder nada pues no tenía acciones en bolsa. Palabras dignas del Primer Ministro de un país.

El objetivo básico de todos estos discursos ha sido sin duda tensar el ambiente e implicar en el conflicto a votantes del AKP que se habían mantenido al margen de todo. Así, hay dos grandes mítines previstos para el fin de semana que viene, uno en Sincan, cerca de Ankara, y el otro en Estambul.

La gente que sigue en el Parque Gezi o la que cada día se concentra en muchos puntos  no se ha desanimado pero ha empezado a ver que si la explosión de descontento que provocó los disturbios no ha conseguido que el Primer Ministro dé el brazo a torcer o simplemente se muestre comprensivo hacia las peticiones pocas opciones quedan ya. En los discursos del domingo, además de volver a rebajar a todos los manifestantes a la categoría de ‘gamberros’ (algo que ya no incomoda a la gente pues el término ha ido adquiriendo un nuevo significado, el de resistente),  Erdoğan  se ha servido de mensajes simbólicos de gran fuerza entre la población como el consumo de alcohol en una mezquita (noticia desmentida) o la bandera turca (dijo “serían capaces de quemar la bandera turca).

Da la sensación que el gobierno ha marcado ya una estrategia a seguir que presenta varios planes de acción a ejecutar a través de distintas vías y que persiguen el agotamiento de los grupos que resisten.  Por un lado, se busca la movilización de la gente y se organizan mítines políticos para dañar la imagen de los protestantes, descalificar los actos y tergiversar el significado de las protestas. En estos mítines y discursos que realiza el Primer Ministro a través de los medios (ayer por ejemplo habló ante los miembros de su partido y su discurso fue transmitido en vivo mientras la policía cargaba de nuevo en Taksim) se busca además sacar rédito del carácter heterogéneo de los protestantes que a excepción de la Plataforma Taksim que pide la conservación del Parque Gezi y la prohibición del uso de gases lacrimógenos no ha sido capaz de organizarse como un movimiento coherente. Los protestantes coinciden en sus críticas a las políticas de Erdoğan pero discrepan en otros puntos como el qué vamos a hacer y cómo. En las redes sociales es posible encontrar críticas a gente acampada que se lo están tomando todo como una fiesta y así están perjudicando al movimiento en general y dañando su imagen, que por culpa de los medios y del gobierno ya de por sí está dañada ante los ojos de parte de la población.

Otro de los puntos de la estrategia del gobierno parece ser la búsqueda de cabezas de turco. Ayer, después de muchos días sin policía por Taksim, 20 autobuses llegaron a las 7 de la mañana y se posicionaron  con sus TOMAs (los tanques anti-disturbios, Vehículos de Intervención en Sucesos Colectivos en sus siglas en turcos), sus AKREPs (los vehículos más pequeños) y todo un contingente policial de 2500 agentes con escudos y gases lacrimógenos. Avisaron por megafonía que no iban a intervenir en el Parque, que solo estaban allí para desalojar a la gente que había entrado en el AKM (Centro Cultural Atatürk) y que iban a quitar los carteles que los protestantes habían colgado allí.  

La gente acampada vivió con tensión esos momentos y formó una cadena humana para evitar la entrada de la policía en el parque. De repente, aparecieron varias personas lanzando cócteles molotov a la policía e incendiando uno de los vehículos. Al cabo de poco el Valí (gobernador de la región) de Estambul afirmó a través de twitter que habían identificado a uno de los atacantes y que era un miembro del SDP (Partido de la Democracia Socialista), uno de los pocos partidos de izquierda que quedan en Turquía. Después, la policía se retiró de Taksim  y entró en el edificio del SDP en Beyoğlu (el distrito municipal donde se encuentra Taksim) y 70 personas fueron detenidas. Representantes del SDP han negado los hechos y en una de las fotografía de los atacantes con cócteles Molotov  se ha podido ver que llevaba una pistola. En el parque nadie conocía tampoco a los atacantes que lanzaban cócteles molotov. Da que pensar.




Bien, tras la exposición de los hechos, uno no puede evitar imaginar que se trata de una conspiración para provocar un desenlace más rápido del conflicto y terminar con la acampada cuanto antes. La izquierda política en Turquía, ya de por sí muy debilitada y oprimida por parte del ejército, de la policía y de los distintos gobiernos desde el golpe de estado de 1980, puede convertirse en un nuevo cabeza de turco.


La tensión se mantuvo alta a lo largo de todo el día no solo por lo que estaba ocurriendo en Taksim sino por otras noticias que iban apareciendo. Ayer pudimos ver en internet las imágenes en las que la policía dispara a Ethem Sarısülük, el segundo día de protestas en Ankara, provocándole muerte cerebral. El fiscal abrió una investigación y tras una semana la policía aún no ha enviado ninguno de los documentos que el fiscal ha exigido para la investigación.

 

Por otro lado, los abogados que se ofrecieron voluntarios para defender a los acampados en el Parque GEzi fueron detenidos ayer en los juzgados de Estambul (en total 73 abogados) en unas imágenes escalofriantes. No se puede detener a un abogado de esta manera. Por la tarde se difundió la noticia de que habían sido puestos en libertad. A eso se le llama instrumentalización del miedo. Y de esta manera no ocurre en ninguna democracia (por más defectuosas que sean las democracias).
Aquí tenéis el video:



Sin embargo, el punto más trágico de todo lo que ocurrió ayer fueron las declaraciones del Valí de Estambul, Hüseyin Avni Mutlu. Afirmó que no existía intención alguna de intervenir en el PArque Gezi pero que tras lo ocurrido en Taksim a lo largo del día ya no era posible garantizar la seguridad de los ahí acampados. Hizo un llamamiento a los padres de esos jóvenes para que se los llevaran. Advirtió que no se podían permitir de ningún modo mayores disturbios que grupos marginales querían provocar. 



Si el gobernado de Estambul afirma que los jóvenes del Parque Gezi están en una zona de peligro y que el mismo Estado no puede garantizar su seguridad significa que estamos ante un problema mucho mayor. Significa que se está avisando a la gente de que puede haber muertes y heridos pero que el gobierno no va a responsabilizarse de lo que ocurra a partir de ahora. Prácticamente durante 24 horas el Parque Gezi estuvo envuelto de gases lacrimógenos haciendo difícil a la gente resistir allí incluso llevando máscaras anti-gas. Un titular de un periódico turco reflejaba esta idea hoy: “En vez de solución, intervención”. Un conocido presentado de informativos, Uğur Dündar, terminó su programa en el canal de TV +1, diciendo “No puedo decir buenas noches”. Es muy triste que todo esto esté ocurriendo. En días anteriores yo intentaba llamar la atención para que el mundo, toda la gente, se diera cuenta de que mientras en Taksim los disturbios habían terminado en otras ciudades la violencia policial continuaba y eso no aparecía en los medios. Pero Taksim es Taksim. Estambul es Estambul. Es una de las ciudades más grandes, importantes y conocidas del mundo. Y todo lo que ocurría ayer pasaba en el centro de Taksim, donde están los mejores hoteles, donde más turistas acuden. Taksim es una plaza que no se ha hecho famosa ahora por las revueltas.

Desde aquí y por último culpo directamente al Primer Ministro de esta crisis. Es él el que con sus declaraciones ha tensado más y más el ambiente y ha llevado unas simples protestas surgidas de forma espontánea como una reacción natural a la violencia policial a una confrontación política y social y a una marginalización de todos aquellos grupos que no ovacionan al Primer Ministro, a toda aquella gente que discrepa con su política y su concepción del poder. Pero Turquía sigue siendo ‘un estado democrático’. Será que estamos ante una nueva forma de dictadura, la del siglo XXI. 

Termino con el título de una columna de hoy del periodista Hasan Cemal: "Que Allah le dé un poco de sentido común a Erdoğan".


12 de junio






lunes, 10 de junio de 2013

6.- Demostración de fuerza

 
Hoy domingo día 9 de junio ha sido un día muy intenso. El Primer Ministro ha realizado, con el permiso de las autoridades, una serie maratoniana de discursos en distintos puntos de la geografía turca: primero Adana de camino a Mersin, luego en Mersin y, a su regreso a la capital después de una ausencia de una semana, en el aeropuerto de Esenboğa así como en varios puntos de la capital turca, entre ellos Altınpark y Akköprü. El trayecto del aeropuerto a la ciudad, que puede durar si no hay tráfico unos 35 minutos, ha durado casi 4 horas. Había gente con banderas para recibirlo, policías controlando el paso, miles de coches que se han quedado atrapados en la cuneta esperando a que pasara el autobús del Primer Ministro y francotiradores en las azoteas. Las críticas a las supuesta politización por parte de la oposición de las protestas del Parque Gezi chocan con la parafernalia desplegada imbuida de triunfalismo y de populismo que hemos presenciado hoy.

Los discursos han sido agresivos y dejan entrever que no se cederá en nada ante la gente – a excepción, quizás, de la construcción del centro comercial que aún no se sabe qué será pues el alcalde de Estambul, Kadir Topbaş, aparece cada día con algo nuevo. Erdoğan ha vuelto a descalificar, incluso difamar, a los manifestantes y también los ha amenazado (a ellos y a todos los grupos que los han apoyado o lo están haciendo). Da la sensación de que se procederá a una caza de brujas. Desde hace años nadie podía o no se atrevía a protestar. Ahora muchas personas lo han hecho y entre ellas muchos artistas. Erdoğan les ha avisado que pagarán caro su desprecio y su afrenta al pueblo turco. Ha recordado que solo el pueblo y Allah podrán quitarlo de su cargo y ha vuelto a usar el término ‘çapulcu’, ya de moda en todas partes, término peyorativo que aunque pueda ser traducido como merodeador o saqueador también se corresponde con gamberro.

Algunas de las frases de su discurso:

‘Se molestaron porque les llamé gamberros. Los que se hayan molestado que consulten un diccionario, así verán cuánto de cierto hay en lo que dije’.


‘Si continuáis con las protestas os vamos a responder con el idioma que entendéis’.



‘¿Habíais visto antes algo así? Lo único que hacen es dar golpes y romper. Destrozar y quemar edificios públicos. Quemar coches de ciudadanos, del pueblo. Y eso no fue suficiente. Agredieron a mis chicas con velo. Entraron en la mezquita de Dolmabahçe con cervezas y encima lo hicieron con zapatos’.

(*) Erdoğan usa aquí dos noticias que han aparecido estos días. Una de ellas fue sobre un grupo de mujeres con velo que protestaron en Taksim porque habían sido agredidas verbalmente en sus barrios tras el inicio de las protestas. La otra, lamentablemente, no es una noticia fiable. El segundo día de los disturbios en Estambul el almuecín de la mezquita dejó entrar a la gente para que se refugiara. La mezquita se convirtió en un hospital improvisado. El vídeo que tenéis aquí abajo muestra imágenes de esa noche. Al día siguiente empezó a circular la noticia de que se había bebido alcohol en la mezquita y aparecieron en internet varias fotografías en las que se podía ver la misma lata de cerveza (aplastada) en distintos lugares del recinto. La noticia ha sido desmentida por varios medios incluso por periódicos conservadores y próximos al gobierno como Yeni Şafak y el almuecín ha afirmado que nadie bebió cerveza. Erdoğan, sin embargo, ha usado dicha información en todos los discursos de hoy insistiendo no solo en el consumo de alcohol sino también en el hecho de que la gente entró con zapatos, sacando rédito así de la fuerza simbólica de dicha noticia-rumor.
 
 


‘Nosotros somos uno, estamos juntos, somos muchos y fuertes. Solo os voy a pedir algo. Ya solo quedan siete meses. Siete meses y luego habrá elecciones municipales. Démosles la primera lección democráticamente, quiero se la demos en las urnas. La mejor lección que les podemos dar a esos que calumnian con informaciones falsas será de nuevo en las urnas.



‘Nosotros estamos al lado de los oprimidos y en contra de los crueles. Esto es así tanto en Turquía como en el extranjero. Siempre ha sido así y así será’.



‘Nosotros en 10 años hemos plantado 2800 millones de árboles. Nosotros somos ecologistas. El medio ambiente no es solo verde. El medio ambiente es también cultura e historia. Eliminar la contaminación, traer agua. Yo he hecho todo esto en Estambul y aquí en Ankara Melih ha hecho lo mismo. Y ahora vienen y nos quieren dar lecciones. Vergonzoso’.

(*) Erdoğan hace referencia a su periodo en la alcaldía de Estambul de los años 90 y Melih Gökçek es el actual alcalde de Ankara. Como nota añado que hace unos cinco años se encontraron dosis altas de arsénico en el agua suministrada a la capital y el mismo alcalde afirmó que no era importante, que él cada día bebía esa agua. Además, el número de árboles plantados en 10 años ha sido, según el Ministerio de Bosques y Medio Ambiente (Çevre ve Orman Bakanlığı) de 2,8 millones y no de 2800. 

Erdoğan también ha atacado a los artistas y ha dejado claro su postura en lo que más que una declaración de guerra parece un certificado de defunción, una amenaza en toda regla:


'Y ahora me dirijo a vosotros, los artistas. Hasta ahora que es lo que no habéis obtenido de este gobierno. Ahora todo ha cambiado. Todo va a funcionar distinto. Aquellos que no respeten al gobierno de esta nación, van a pagarlo caro'.

El contraataque del Primer Ministro no ha finalizado aquí. Se han previsto dos mítines políticos para el fin de semana que viene que pretenden ser de espectaculares. Uno el sábado en Sincan, localidad cerca de Ankara donde el AKP acaparó prácticamente todos los votos las anteriores elecciones, y el otro el domingo en Estambul. Mientras Erdoğan terminaba su último discurso en Ankara ya casi a las 21 h de la noche, la policía ya estaba cargando contra los manifestantes en el centro de la ciudad.




Hoy ha sido un día muy movido, muy masivo (por ambos lados) y parece que vuelve a vislumbrarse la polarización que dividió a la población durante 2007 justo cuando finalizaba el primer mandato del AKP. Sin embargo, hay muchos aspectos que distinguen esa polarización de la actual. Entonces habías dos grupos en liza, el nuevo partido AKP que había obtenido un 34% de los votos en las elecciones de 2002 y que había logrado el apoyo de sectores liberales y conservadores con un discurso democrático que ponía énfasis en el diálogo entre todos los distintos grupos y minorías (fueran religiosas y étnicas) y los restos de unas elites kemalistas en declive pero que aún tenían en su poder parte de los medios de comunicación, que respetaban el estatus quo, y cuerpos del Estado como el de los jueces, rectores y amplios sectores del ejército. Los intentos de los sectores kemalistas de perjudicar (intentos democráticos algunos y no tan democráticos otros) al gobierno de cara a las elecciones no tuvieron éxito pues el régimen ya no era capaz de cohesionar a toda la sociedad ante un partido que había conseguido reanimar la economía tras severas crisis a finales de los noventa y que había ido ganando credibilidad a lo largo del primer mandato. Ahora, en 2013, existe un gobierno que ha conseguido mediante vías democráticas (y no tan democráticas) hacer desaparecer todos los focos de oposición y una gran masa de gente al otro lado, sin más apoyo que el de algunos artistas, que el único aspecto en el que coinciden son en sus críticas al gobierno y a la autoritaria forma de gobernar del Primer Ministro.

Eso complica enormemente las posibilidades de que el movimiento tenga éxito a no ser que se abandonen las protestas y empiece algún tipo de auto-organización más allá de los lugares de protesta. No hay un apoyo masivo por parte de ningún grupo político grande. No existe tampoco una ideología común que pueda unificar a todos los asistentes y la gran mayoría de ellos son personas sin ninguna vinculación a partido político alguno. Pero entre esa multitud también podemos identificar, a pesar de que sus dirigentes se hayan desmarcado de los actos y hayan pedido que no se acudiera a ellos con emblemas políticos, a simpatizantes de los principales partidos políticos. Así, hay miembros del MHP (partido ultranacionalista que  rechaza cualquier concesión a los kurdos), del BDP (el partido de los kurdos), también del AKP (disgustados con la actuación del gobierno tras las protestas) y, sobretodo, del CHP (que añoran el kemalismo y siguen teniendo a Atatürk como único héroe de la República). El uso de algunos lemas como “Somos los soldados de Atatürk” ha incomodado a muchos de los manifestantes que han respondido con pancartas con lemas como “No somos los soldados de nadie”. En los discursos de Erdoğan hemos oído estos dos días la réplica: “Somos los soldados de Tayyip”. Hoy, en Kuğulu Park, se ha cantado el himno nacional como si el futuro de la nación estuviera en peligro (lo está para muchos turcos, pero el motivo original de las protestas no era ese). El uso de banderas turcas en las marchas por las distintas ciudades es el mismo que hemos podido observar en los mítines realizados por el Primer Ministro desde su llegada a Estambul el jueves por la noche.

No estamos ante un posible cambio de régimen, no presenciaremos una dimisión así como tampoco creo que se adelanten las elecciones. El gobierno del AKP ha ganado todas las elecciones democráticamente y mientras tenga un apoyo popular no hay presión exterior o interior que pueda realmente modificar nada. El conflicto se ha politizado y el Primer Ministro ha manifestado su resolución de terminar con el problema mediante actos políticos hasta que no les quede fuerza a los protestantes. Teniendo en cuenta que Turquía ha crecido económicamente con el AKP a través de políticas neo-liberales muy agresivas en las que se han privatizado muchas empresas estatales y que han surgido durante estos 10 años corporativas muy fuertes (sean con capital extranjero o sin él), es factible pensar que atacar al mismo sistema neo-liberal que ha hecho fuerte a este partido sería una de las pocas opciones que existiría para conseguir que el gobierno diera un paso atrás o cediera en su empeño de eliminar todo tipo de oposición (política, cultural, social). A pequeña escala esto ya ha ocurrido. En Ankara, tras el cierre de las puertas a protestantes que huían de la policía en varios locales de la ciudad, se pidió el boicot a esos locales. Entre ellos, el Leman Kültür, un local que siempre está lleno, y la heladería Mado, también con mucha clientela. Sorprende ver ahora a estos locales con solo 2 o 3 mesas ocupadas. La situación ha llegado a tal punto que en Mado se han colgado banderas turcas. Los ataques a los serviles medios de comunicación también han sido, de momento, efectivos. La mayoría de empresas del sector de la comunicación en Turquía forman parte de grandes corporativas con empresas en sectores muy variados entre los cuales destaca el sector bancario. La retirada de efectivo de cuentas bancarias y la cancelación de tarjetas de crédito en el Banco Garanti en protesta a la cobertura ofrecida por NTV (del mismo grupo) ha obtenido resultados rápidos ya que desde el lunes de la semana pasada algunos informativos empezaron a ser relativamente críticos con el gobierno y con la actuación policial y ofrecieron imágenes de cargas contra los jóvenes.

Pero para eso es necesario una toma de conciencia, mostrar una postura uniforme en algunos aspectos y pasar a otro tipo de protesta distinta a la lucha callejera. También se debería abandonar la diversión y la fiesta que se vive durante las horas del día en muchas ciudades y casi a todas horas en Gezi. Las redes sociales deberían seguir cumpliendo la función que han llevado a cabo de informar y promover actos de protesta pasiva y pacífica.

De hecho muchos de los que apoyan a las protestas (sea presencialmente o a través de las redes) insisten en que se debe seguir resistiendo. ¿Pero cómo? ¿Contra qué? El gobierno cuenta con un suficiente apoyo electoral para volver a ganar las elecciones y las luchas callejeras tampoco están dando sus frutos pues cada día se repite la misma situación y el agotamiento empieza a hacer mella. Continuar solo causaría daños humanos y no resolvería nada.

Para rebajar un poco la tensión os dejo con un video del grupo Kardeş Türküler en apoyo a las protestas (con subtítulos en inglés):


9-10 de junio



domingo, 9 de junio de 2013

5.- ¿Recibimiento?

Tras la vuelta del Primer Ministro del Magreb, sus declaraciones en Estambul ante representantes de la Unión Europea y el ambiente festivoque se vivía en el Parque Gezi, con los ojos de medio mundo puestos allí, se ha conseguido rebajar la tensión que se reflejaba en los medios internacionales. Titulares como los de El País "Erdogán da marcha atrás y dice que escuchará las 'exigencias democráticas' son una muestra de ello. Sin embargo, y como ya he remarcado con anterioridad, la demostración de fuerza del AKP en el aeropuerto de Estambul no va a conseguir sino elevar la tensión. La noche del viernes transcurrió con tranquilidad  pero ayer volvieron a registrarse episodios violentos en Ankara donde más de 5000 personas se habían concentrado por la noche. Siempre ocurre de la misma manera: de día se juntan en Kuğulu Park miles de personas. La policía no aparece pues hay familias, niños, gente mayor. A partir de cierta hora de la noche, cuando esas familias ya han regresado a sus casas y ya solo quedan jóvenes empiezan las cargas policiales.

En Adana también se repitieron actos de protesta y se vivieron momento de tensión entre seguidores del AKP y los protestantes. En Izmir, la plaza de Gündoğan estaba llena y las imágenes que llegaban de allí eran impresionantes:


Y aquí unas imágenes de la acampada en Eskişehir, a medio camino entre Estambul y Ankara:


Lo paradójico de todo lo que está ocurriendo es que ayer en los medios internacionales no apareció información de las protestas en Ankara, Izmir y Adana. La cobertura ya no es tan amplia, parece que esté dejando de ser actualidad; en cambio, aquí, por fin, pudimos seguir esos actos por los canales de televisión. Al menos, un avance.

Hoy hay marchas convocadas a las 14:00 horas en muchos puntos del país. Poco a poco, tras las protestas por el Parque Gezi, ganan las voces que quieren redirigir las miradas a otro parque, más que un parque, a una zona protegida de Ankara, la Granja-Bosque Atatürk (AOÇ, Atatürk Orman Çiftliği), una zona muy extensa en la que se encuentra el zoológico de Ankara, varias fábricas que antaño habían sido estatales y un pequeño barrio, el Gazi Mahallesi. Se acusa al AKP de haber talado 3000 árboles para construir un palacio para el Primer Ministro. Yo no sé número de árboles pero he pasado por el solar donde se va a realizar la construcción y tengo que decir que impresiona. Aquí, una fotografía publicada por la Cámara de Arquitectos de Ankara del 9 de mayo.





Esta entrada la actualizaré por la noche para contar un poco qué ha ocurrido a lo largo del día de hoy.

De momento, da la sensación de que Estambul y los concentrados en el Parque Gezi se estén olvidando de que hay protestas y violencia policial en muchos puntos del país. A través de las redes sociales gente reclama atención hacia Ankara y hacia otras ciudades pero parece que Estambul viva su propia fiesta ajena al resto. Es importante que el movimiento se organice, como el 15-M, y estaría muy bien que presionara a grupos económicos para que dejen de apoyar algunas políticas del gobierno. A mi parecer, esa sería una buena forma de efectuar presiones al gobierno porque otras vías parecen ser infructuosas. El gobierno no cederá en la construcción del Cuartel en el Parque Gezi, ahora afirma que no será un centro comercial sino un museo. Más preocupante es lo que está ocurriendo con el Centro Cultural Atatürk (Atatürk Kültü Merkezi), que tras varias protestas se había conseguido detener ya hace 2 años su demolición por parte del ayuntamiento. En 2012, el ex-Ministro de Cultura y Turismo  Ertuğrul Günay informó de que se iba a proceder a la restauración del edificio, noticia que ilusionó a muchos istanbulitas. Las empresas Yeni Yapı y Taca se iban a encargar de la restauración tras ganar un concurso por valor de 69 millones de liras. Además, el Holding Koç informó de que iba a donar 30 millones de liras para las obras. Bien, durante los incidentes en el Parque Gezi mucha gente consiguió entrar al edificio que lleva tiempo cerrado y comprobaron que no se había realizado ninguna labor, el edificio estaba por dentro casi derruido.

Esta es la política del AKP que engaña con palabras. Tras convencer a la gente de que se iba a a restaurar el edificio iba  ser a igualmente derruido para continuar con el plan original de una nueva construcción.

Ahmet Saymadi, en un artículo online publicado en Bianet.org, resume en 'dos' palabras todo lo ocurrido: "Nada será como antes" (http://www.bianet.org/bianet/siyaset/147389-kaldirim-taslarinin-altindaki-kumsal).¿Qué cambiará? ¿Qué pasará los próximos días? Pase lo que pase habrá un antes y un después de las protestas pues la gente ha perdido el miedo. Es necesario, sin embargo, que se organice y que se llevan a cabo acciones eficaces. Hay vías para ello.

Hoy se espera la llegada del Primer Ministro a la capital alrededor de las 18:00 y todos, todos, quieren recibirlo. La noticia a seguir más importante del día seguramente será esta. 

Sigo informando por la noche a través de esta misma entrada.
Más tarde desde aquí podéis seguir retransmisión en directo de Ankara:
http://www.ustream.tv/channel/direngeziparki-ankara1
Y del Parque Gezi:
http://capul.tv/

Las retransmisiones suelen empezar a las 16:00 horas y puede haber cambios.


sábado, 8 de junio de 2013

4.- Día de tregua ...


La llegada del Primer Ministro el jueves por la noche al Aeropuerto Atatürk de Estambul fue una puesta en escena increíble, podríamos decir que prácticamente se convirtió un mitin político organizado en poco tiempo pero en toda regla. Mediante el hashtag en twitter #WeAreErdogan, trendtopic apresurado de ayer, se pudo juntar a miles de personas. Se facilitaron autobuses para llevar a las masas al aeropuerto, se retrasó el vuelo del mandatario casi 3 horas y de forma paradójica, el servicio de metro que va de Aksaray al aeropuerto y que finaliza a las 23:55 de la noche cada día se mantuvo abierto hasta las 4 de la madrugada. Un sistema de megafonía iba informando e indicando a la multitud y se habituó un palco para que el Primer Ministro, del que en teoría no se esperaba un discurso, pudiera dirigirse a sus seguidores. Habló, habló de todo y lo hizo durante media hora que, naturalmente, pudo ser seguida en directo desde varias cadenas de televisión. Mientras, en Ankara, el servicio de metro y autobuses hacía horas que había dejado de llegar al centro.

Con esta muestra de poder y de confrontación hacia los protestantes que llevaban ya más de una semana en la calle podemos decir que se termina el primer capítulo de las Protestas por el Parque Gezi. Ante lo que había sido una reacción espontánea de gente de toda ideología, el AKP y Erdoğan consiguieron llevar el asunto a una confrontación política del tipo “Eres de los nuestros o estás contra nosotros”. Hubo un momento incluso en que las masas gritaron “Déjanos ir, vamos a destrozar Taksim” y el Primer Ministro, antes de continuar, permitió que jalearan el lema durante un rato para luego decir “de aquí nos vamos a casa de forma pacífica”.

El montaje ha sido claramente un aviso de que no se cederá ante ninguna presión que venga de las calles. La gente que se acercó al aeropuerto dejó claro su amor a ciegas hacia un líder más que hacia una política. Erdoğan recitó un poema de Mehmet Akif Ersoy, autor de la letra del himno de independencia de la República de Turquía (İstiklal Marşı) que empieza y se titula así: “No aplaudiré la crueldad, nunca querré al cruel”. Nota: Ersoy, nacionalista turco y a la vez islamista se auto-exilió a Egipto poco después de la fundación de la República por su disconformidad con Atatürk y la línea ideológica que estaba siguiendo el nuevo estado.

Las palabras de Erdoğan fueron duras hacia los manifestantes, los ‘çapulcu’, y dedicó parte de su discurso al policía muerto, al que se refirió como ‘mi policía’, del que destacó su labor protegiendo a Turquía de los terroristas, los anarquistas y los vándalos.

Sin embargo, el mensaje de Erdoğan no parece que haya hecho mella en los resistentes, como se llaman ya a si mismos (direnişçi). Si hay una cosa que admiro del pueblo turco es su capacidad y su talento para ser práctico cuando toca, para solucionar un problema de forma rápida. Mucha gente con la que hablé ayer no estaba sorprendida de lo que ocurrió en el aeropuerto, más bien se lo esperaban. Hoy el día ha transcurrido tranquilo. En Taksim la fiesta ha continuado e incluso un grupo ha realizado las plegarias del viernes mientras las actividades continuaban. En Kuğulu Park, en Tunalı (Ankara) se vivía también un ambiente festivo y la gente charlaba, escuchaba música y esperaba. ¿Por qué no ha habido tensiones hoy? Muchos dicen que es por un examen que todos los estudiantes que empezarán instituto tienen que superar mañana, como una especie de selectividad (pobrecitos).

El cartel dice lo siguiente:
ESTA NOCHE RESISTE EN SILENCIO
Los pequeños están durmiendo ...
Mañana hacen el examen SBS, que descansen un poquito.


Hoy ha sido como un día de tregua a la espera de lo que ocurrirá. De momento ya hay información de que el domingo se quiere convocar el acto de protesta más masivo desde que empezó todo. Por otro lado, Emniyet (el cuerpo de policía) ha confirmado que no habrá ningún desalojo hasta, como mínimo, el lunes. Además se ha especulado en Ankara sobre la posibilidad de celebrar elecciones anticipadas en 2014 (municipales y generales). Erdoğan ha vuelto a aparecer hoy, protegido por un gran despliegue policial, en el Hotel Swiss de Estambul para participar en la conferencia “Futuro común para Turquía y la Unión Europea ante los problemas globales” organizada por la Presidencia de la Unión Europea. En su discurso ha hecho hincapié de nuevo en el uso de gases lacrimógenos en países occidentales citando que hubo 17 muertos en las protestas de Occupy Wall Street. Ha repetido que protegen los árboles, reafirmado las bondades del proyecto y ha alertado de la desinformación así como criticado a los medios internacionales. El tono, naturalmente, nada que ver con el discurso de la noche anterior.

En definitiva un día tranquilo pero que no augura paz. Las protestas en los barrios han continuado pero han sido como de rigor, han empezado a las 9 de la noche y a las 10 ya habían terminado. Muchas familias tienen niños que harán mañana el examen y las bocinas no han seguido sonando hasta las tantas como las otras noches.

Mucha gente piensa (yo también) que ocurra lo que ocurra al menos se ha logrado ya algo muy importante: perder el miedo a protestar contra una política y un Primer Ministro que tiende cada vez más a dictar a sus habitantes lo qué pueden hacer y lo que no. Eso es un primer paso nada desdeñable. Además, la violencia y la represión policial han sido observadas de cerca por millones de espectadores e internautas de todo el mundo que han podido tomar conciencia sobre problemas internos de Turquía que habían pasado desapercibidos hasta el momento.

Seguiremos el domingo y se agradecen comentarios, propuestas y correcciones.


7 de junio

viernes, 7 de junio de 2013

3.- La tensión aumenta en Turquía


Ya estamos en la octava noche de protestas y todo continúa igual. Bueno, todo no. El Parque Gezi es una fiesta donde todo el mundo tiene cabida, los artistas alzan sus manifiestos y los medios de comunicación reflejan un aura de tolerancia y buen entendimiento. Mientras, ciudades como Ankara, Izmir y Hatay parece que estén cayendo en el olvido cuando es en esos lugares donde la violencia policial sigue en activo y donde la tensión se refleja en el día a día.

Hoy, al mediodía, he estado paseando por Kızılay, el centro moderno de Ankara (el centro histórico se encuentra en Ulus, alrededor del antiguo castillo). En cada esquina hay autobuses llenos de policías a la espera. Hay poca gente, ya que andar no significa un problema y uno no choca como de costumbre con los viandantes. La gente se mira, está tensa. A partir de las 17:00 de la tarde los autobuses dejan de acercarse al centro. Si uno quiere ir al centro a apoyar las protestas tiene que apearse en la última parada que suele (digo suele porque ya son varios los días que no hay transporte urbano municipal por las tardes) estar lejos. Por ejemplo, ayer, volviendo de dar clases en Ümitköy me tuve que bajar en la Biblioteca Municipal (Milli Kütüphane) que está a 3,5 km de Kızılay.

Ahora, a estas horas en las que estoy escribiendo esto (casi las 12 de la noche) Kızılay está lleno así como Tunalı, otra zona céntrica no muy lejos de allí. Se puede seguir en directo por varios canales que emiten online. Abajo tenéis una fotografía de Kızılay y otra de Tunalı tomadas ambas a las 22:00 horas.




La violencia no solo ha continuado en Ankara. En Hatay, donde se produjo la segunda muerte, la policía ha cargado mientras la gente estaba concentrada en señal de luto por Abdullah Çömert. Ayer también hubo incidentes en Antalya, Adana, Tünceli y Rize. En esta última localidad la situación ha sido confusa y preocupante. Varios protestantes del TGB (Unión de Jóvenes de Turquía) y del ADD (Asociación del Pensamiento Kemalista) han sido agredidos por la población sin que la policía cargara o actuara contra los agresores. Una mujer se ha desvanecido y ha habido muchos problemas para llevarla hasta la ambulancia. Uno de los agresores, incluso, se ha subido al volante de la ambulancia y ha forcejeado con un policía. Más tarde los protestantes se han refugiado en un edificio y han quedado atrapados hasta que más tarde la policía los ha desalojado en un vehículo.

Lo de Rize tiene un significado especial pues es el lugar de nacimiento del Primer Ministro y es la primera vez que ciudadanos se enfrentan contra los protestantes. En las redes sociales se han quejado de que la policía no interviniera como lo ha estado haciendo todos estos últimos días.

Otra noticia que puede poner en peligro el futuro de las protestas nos ha llegado desde Adana donde un policía ha caído por un puente y ha fallecido. La reacción ha sido instantánea en los medios y se han ofrecido noticias ocupando gran parte de los informativos sobre el caso, sobre la posibilidad de que fuera empujado por uno de los ‘provocadores’ y se ha hecho especial hincapié en las bondades del policía. En Twitter mucha gente ha lamentado la muerte del policía ubicándola al lado de las dos muertes confirmadas hasta ahora pero también se han podido leer twitters de gente acusando a los protestantes de asesinos, incluso algún twitter que culpaba a los grupo ecologistas que habían iniciado la acampada en el Parque Gezi hace ahora mismo semana y media.

Mientras cadenas de televisión como NTV y CNN ofrecen ya una versión más equilibrada de todos los actos y de las protestas, en otros canales como la estatal turca, TRT, y ATV han mantenido la imagen de ‘provocador’ con noticias confusas como la de un niño de 12 años que los manifestantes han tirado por un puente y se ha roto una pierna.

En el plano político hoy ha sido un día de cal y de arena. El Vice-Primer Ministro, Bülent Arınç, se ha reunido con la Plataforma Taksim que le ha entregado una serie de peticiones, entre las cuales está la de mantener el Parque Gezi tal como está y la de que se prohíban los gases lacrimógenos usados por la policía (sobretodo después que hayan surgido a la luz acusaciones de que se ha estado usando agente naranja). Por otro lado, el Primer Ministro Erdoğan, ya finalizando su viaje por el Magreb, ha hablado por primera vez de las revueltas desde la capital tunecina. Sus declaraciones han sido bastante decepcionantes pues se esperaba un tono más congraciador. El Primer Ministro ha reafirmado que el proyecto se llevará cabo y no se ha retractado de nada de lo dicho durante el fin de semana. Traduzco una de las preguntas que le han hecho:

-        Bülent Arınç ha pedido perdón a los que se han visto expuestos de forma excesiva a los gases lacrimógenos. ¿Usted lo acepta? ¿Va a abrir la puerta del diálogo a los manifestantes?
-        Queridos amigos, mi ayudante ha hecho las declaraciones pertinentes. Ustedes claro parece que no lo están siguiendo. Si esto tiene que ver con un uso abusivo del gas lacrimógeno, nosotros ya hemos manifestado nuestro pesar. Tenemos que corroborarlo. No hay ningún sitio en la tierra, incluyendo a los países desarrollados, en el que no se usen los gases lacrimógenos. No es posible buscar aquí un vía ilegal. Si queréis hacer un encuentro, hay sitios para ello. Id y lo hacéis allí. Si hacéis una manifestación, también podéis hacerla allí. Pero eso de que donde quiera yo hago un mitin, quemo, destrozo, eso no se va a permitir. Nosotros somos un partido que ha obtenido 21 millones de votos. Nunca hemos echado a nuestros electores a la calle cuando han intentado ilegalizar el partido. Y eso nos ha dado la razón. La sentencia judicial fue a nuestro favor. La sentencia del juez fue neta y clara. Nosotros estamos en contra de que la mayoría oprima a las minorías. Pero no podemos aceptar que la minoría oprima a la mayoría. Sepamos que lo mejor que se puede hacer es proteger la leyes. También tenemos que proteger la belleza natural de Estambul. (fuente, periódico Radikal: http://www.radikal.com.tr/politika/basbakan_erdogan_topcu_kislasini_yapiyoruz-1136521)


Erdoğan está a punto de  aterrizar. El día de mañana es muy importante. ¿Qué dirá? ¿Canales como NTV y CNN seguirán en la tónica de estos últimos días? ¿Cuándo se desalojará Gezi? ¿En Ankara, en Izmir, en el resto de ciudades las protestas serán más masivas? ¿La policía reprimirá de nuevo a los manifestantes? ¿Volverán a verse tensiones como las de hoy en Rize?

Además, quería comentar otras noticias ocurridas hoy. En Izmir 34 personas han sido detenidas por ‘impulsar al pueblo a delinquir’ a través de las redes sociales (de nuevo, twitter). A esta horas, 33 de ellas ya han sido puestas en libertad. También se ha sabido que 11 extranjeros han sido detenidos en las protestas, de ellos 4 estudiantes Erasmus, que ahora se enfrentan a ser expulsados del país e incluso a acusaciones más graves.

Por último, cabe remarcar un aspecto más de las protestas que le dan un carácter distinto a otras protestas como las del 15-M. En España la gente se concentraba en puntos neurálgicos de las ciudades como la Puerta del Sol en Madrid o Plaça Catalunya en Barcelona (y muchos muchos más claro). Aquí, sin embargo, hay un foco central como sería Gezi en Estambul, Gündoğan en Izmir y Kızılay en Ankara pero en cada barrio hay protestas generalizadas. Sin más, en el barrio de Dikmen anoche unas 3000 personas marcharon por las calles y la policía tuvo que intervenir, en el barrio de 100. Yıl también se vivieron momentos de tensión. Entonces, el número de asistentes a las protestas es mucho mayor que el que se aprecia en las plazas centrales.


Termino esta entrada con un poco de temor pues estoy viendo imágenes en directo del Aeropuerto Atatürk en Estambul donde el Primer Ministro está a punto de aterrorizar. Las masas pro-Tayyip han tomado la autopista que llega al aeropuerto lanzando cánticos al Primer Ministro y algún que otro “allahuakbar” y “tekbir”. Un autobús del AKP está en la entrada del aeropuerto haciendo un mitin político. ¿Estamos ante un conflicto de mayores dimensiones? ¿El 50% de la población que el Primer Ministro afirmó que estaba conteniendo en sus casas ha salido ya a la calle? No quiero ser pesimista, pero la gestión de la crisis por el Primer Ministro desde el principio puede haber provocado una crisis nacional que lleve a Turquía a desequilibrios mayores. Esperemos que no.

Aquí una imagen tomada con captura de pantalla:




6 de junio

jueves, 6 de junio de 2013

2.- Los medios de comunicación ceden a la presión y el Primer Ministro se va de viaje

(esta entrada corresponde a un segundo escrito sobre las protestas que difundí por las redes sociales del 5 de junio. Tal cual lo publico)


 
Todo lo que está pasando en Turquía ocurre a tal velocidad que es difícil aún sacar conclusiones e incluso entender qué está ocurriendo a cada momento. Las protestas iban evolucionando hacia un punto muerto en el que la violencia se había apoderado de las concentraciones en muchos puntos del país. Mientras Taksim (en el Parque Gezi) se había pacificado y gente de todo tipo acampaba de nuevo, en ciudades como Ankara, Izmir y algunos barrios de Estambul como Beşiktaş la lucha se había radicalizado. En ciudades de regiones como la de Hatay, donde reside una gran parte de la población árabe-turca, las protestas provocaron una segunda muerte, la de un chico de 22 años, Abdullah Cömert.

Sin embargo, la salida del Primer Ministro Erdoğan del país ha sentado las bases para un cambio en la línea política del gobierno hacia las protestas. Tras las declaraciones del Presidente de la República, Abdullah Gül, pidiendo calma, admitiendo un exceso en el uso de la violencia por parte de la policía y afirmando que el mensaje de la población había calado, que la democracia no se trata únicamente de comicios electorales, ayer el Vice-Primer Ministro, Bülent Arınç, pidió incluso perdón por las cargas policiales del viernes y llamó a los de la Plataforma Taksim para sentarse y dialogar. ¿Es todo esto una muestra de desavenencias dentro del mismo gobierno o se trata simplemente de una estrategia para sofocar las protestas y volver a la normalidad?

Por otro lado, las protestas de ayer se dirigieron también a los medios de comunicación dominantes. Miles de personas retiraron efectivo y anularon tarjetas de crédito de bancos como el Garanti, del Holding Doğuş que a su vez controla el canal de televisión NTV. Protestas frente a la sede central del Banco Garanti quejándose de la cobertura (o más bien de la no-cobertura) de las protestas obligaron incluso a su Director General a disculparse diciendo: “Yo también estaba allí, yo también soy un gamberro”, en referencia al apelativo usado por el Primer Ministro para referirse a los protestantes el sábado 1 de junio. En las redes sociales protestas similares aparecieron contra la cadena CNN Türk que había ofrecido un documental sobre pingüinos mientras la CNN Internacional transmitía en directo las protestas. 

Ayer por la noche en casi cada barrio de las grandes ciudades turcas se organizaron actos de protesta programados a partir de las 21:00 horas. En mi barrio empezó de forma puntual con gente en la calle, cacerola y cuchara en mano, alguna que otra persona con tambores y prácticamente todos los coches tocando la bocina continuamente. El ruido y el jaleo continuó hasta las 12 de la noche. Es increíble ver cómo el pueblo turco no se cansa de protestar pues cada día hay más ambiente por la noche.

Respecto a la violencia, ayer el grupo Çarşı de Beşiktaş en un comunicado informó que no se enfrentaría con la policía y que solo marcharía hacia Taksim. En Ankara, en Kızılay, miles de personas volvieron a concentrarse pero en este caso la policía se mantuvo durante horas sin cargar. A última hora se tiene constancia de que hubo lanzamientos de gases lacrimógenos pero ya a una escala menor. El único punto preocupante, a mi parecer, es que las protestas se extiendan y se radicalicen en otros puntos de la geografía turca donde existe una población mayoritaria kurda o aleví, ya que esto dotaría de otro significado al conflicto y podría dividir a la población. Ayer hubo choques violentos en Dersim (con población aleví), en Tunceli (kurda) y Hatay (árabe).

El cambio más significativo, sin embargo, pudimos observarlo en los canales de TV. Ayer, a excepción de la cadena estatal TRT y alguna más, la mayoría de los canales de TV informaron, por primera vez, de forma distinta. Al fin, los espectadores turcos pudieron ver imágenes de la policía cargando contra jóvenes, pudieron escuchar las declaraciones de muchos protestantes y se dio voz a todos los representantes políticos, incluso a los del BDP kurdo, que pidieron sin discrepancias un cese de la violencia. También se cuestionaba la actitud policial y se pedían explicaciones sobre las primeras cargas del viernes.

Aunque esta actitud de los medios pueda parecer hipócrita, aunque el principal motivo pueda haber sido proteger los intereses económicos (el lunes, la bolsa de Estambul cayó un 10%) podemos apreciar un punto de inflexión que puede conseguir que las protestas y su significado no caigan en el olvido. Gran parte de los telespectadores turcos han vivido estos días ajenos a lo que estaba ocurriendo. Como mucho, cuando iban por la mañana a sus trabajos veían los destrozos ocasionados en el centro. Luego en los medios se hablaba de grupos radicales. El Primer Ministro los definía como gamberros. Esa imagen negativa, de haber continuado así, se hubiera mantenido. Pero desde ayer se ofrece también otra imagen, la de la policía atacando a jóvenes, la de la policía cargando sin necesidad contra gente mayor. Que eso aparezca ahora en los medios es de vital importancia porque puede ayudar a que parte de la audiencia valore de forma diferente lo ocurrido y que desaparezca esa imagen de joven-universitario-radical-de izquierdas que desde hace tanto tiempo se difunde en los medios. Puede ayudar a mostrar que el gobierno se ha estado entrometiendo en la vida privada de sus ciudadanos, que Turquía realmente se ha convertido en un estado policial y que ha estado cargando contra sus propios ciudadanos sin motivos reales.

Ahora queda por ver cómo reaccionará el Primer Ministro a su vuelta, mañana día 6 de junio. Bülent Arınç afirmó que sus declaraciones habían sido tomadas por el gabinete y que el mismo Primer Ministro estaba informado. De continuar así, ¿la imagen de Tayyip se verá perjudicada dentro de Turquía? Para una parte de la población ya era muy negativa pero no así para los votantes del AKP que lo perciben como una especie de héroe de la democracia. No creo que las protestas vecinales decaigan pero sí deseo que las protestas violentas en las ciudades terminen porque a la larga solo pueden perjudicar a los mismos protestantes. El Parque Gezi, de momento, es una fiesta a la que todo el mundo puede acudir. El gobierno seguirá tomando decisiones políticas sin ningún obstáculo gracias a su mayoría absoluta pero quizás rebaje su actitud arrogante que desprecia continuamente a un amplio sector de la población turca. Y ese era uno de los principales motivos que había llevado a la gente a las calles.

Para terminar celebro que un buen amigo saliera ayer libre después de estar dos días detenido.



Marc Saurina Lucini
5 de junio de 2013

1.- El Parque Gezi. De una acampada a un estallido de revueltas por todo el país

 
(Esta entrada corresponde a un primer escrito sobre las protestas de Turquía escrito el 3 de junio. Tal cual lo difundí en su momento lo incluyo aquí)


Os escribo para hacer una pequeña aportación a las informaciones que podáis estar recibiendo sobre lo que está pasando en Turquía. Son mis impresiones tras una semana desde el inicio de la acampada y tras tres días ya de disturbios violentos por todo el país. No solo está pasando en Estambul, sino que en Ankara el centro aún está intransitable y juzgando la reacción de la gente en muchos barrios de la ciudad parece que va a continuar así durante cierto tiempo. Os pido que lo compartáis, que lo publiquéis donde queráis, que lo hagáis saber. No se trata de imágenes, sino de un análisis de cómo se ha llegado a este punto.

Una cosa es cómo empezó y la otra es dónde se está ahora mismo. El origen está en la construcción de un centro comercial en el Parque Gezi al lado de Taksim, donde empieza la famosa avenida peatonal Istiklal, que iba a ser simplemente uno más de los muchos centros comerciales construidos estos últimos años que han infestado las grandes ciudades y han puesto en peligro lo que podríamos llamar la ‘vida social’ que se desarrolla en pequeños locales, bares y calles. Pero la reacción en cadena de la gente se debió más a la violencia usada por la policía para desalojar a los cincuenta acampados que protestaban en silencio. El miércoles por la noche un primer desalojo sin éxito ya que los acampados regresaron al día siguiente. El jueves Erdoğan habló y sus comentarios fueron percibidos como una provocación más: “Nosotros ya hemos tomado la decisión y hagan lo que hagan la construcción se va a llevar a cabo”. El jueves por la noche el desalojo fue especialmente violento, los manifestantes se refugiaron la mayoría en el Hotel Divan, colindante al parque y la reacción de los istanbulitas al día siguiente podríamos decir que fue espontánea. A medida que avanzaba el viernes más y más gente se concentraba alrededor de Taksim. Las primeras imágenes de batallas campales y de cargas policiales que seguramente visteis por la televisión son del viernes por la noche.

Se puede decir que quien no usara las redes sociales el viernes, no llegó a enterarse de nada de lo que ocurría pues en ningún canal de televisión apareció noticia alguna esa noche (a excepción de dos canales con poca audiencia en los que se ofreció alguna imagen y alguna crítica encubierta). Aún así, la magnitud del conflicto y la afluencia masiva de gente hacia Taksim obligó a los medios a hablar sobre ello y forzó al mismo Primer Ministro a hacer declaraciones. En este punto creo que es donde realmente estalló el conflicto ya que las declaraciones de Erdoğan echaron más leña al fuego y los manifestantes se empezaron a descontrolar. El Primer Ministro desmintió que se fuera a construir un centro comercial, afirmó que estaba aún por decidir, que quizás sería una mezquita o una ópera, que su partido había plantado árboles por todas partes y dirigió sus críticas al partido de la oposición como si de una manipulación se tratase. En muchos medios de comunicación empezó a hablarse de grupos radicales, ilegales, de izquierda, de provocadores y se ofrecían imágenes de chicos tirando piedras a la policía, mientras los videos y fotografías que se estaban difundiendo en las redes sociales mostraban la otra cara, la violencia de la policía. De hecho, del viernes y del sábado han quedado imágenes sorprendentes como la del tanque de la policía que para derribar una barricada se lleva por delante a un manifestante o la de una chica sola que agreden sin pudor con chorros de agua y bombas de gas.

La estrategia seguida por el gobierno y los medios para descalificar ante los ojos de gran parte de la población a la gente que acudía a la manifestación fue un punto más para que la violencia callejera se apoderara de las calles, para que se perdiera un poco el rumbo y se olvidara lo que había pasado al principio. Ahora mismo lo veo como un tira y afloja donde nadie cede, donde el Primer Ministro redirige los debates a donde le interesa creando más y más crispación entre los muchos jóvenes que están en las calles. Sobre la violencia de la policía, las únicas declaraciones oficiales han sido que se investigará si ha habido o no un exceso. Por ejemplo, ayer, en una entrevista al Primer Ministro en Habertürk, el tema se centró en la prohibición del alcohol, como si la gente estuviera rompiendo cajeros, autobuses y aceras solo para poder beber cerveza. Ese es el punto triste de la historia pues gran parte de la población creo que no se enteró de nada el viernes por la noche y cuando empezaron a aparecer noticias en los medios y se emitieron las primeras declaraciones de Erdoğan se potenció la idea de que era un grupo de marginales que lo único que hacía era romper cosas ante la mirada inocente de la policía. Hay muchos, muchos heridos. Yo creo que hay muertos pero naturalmente no tenemos datos en los que basarnos. Hay miles de detenidos. Ha habido protestas en Estambul, Ankara, Esmirna, Eskisehir, Antalya y muchas otras ciudades. Desde hace dos días la población sale a las calles, cacerola y cuchara en mano, y los coches tocan el claxon. El sábado por la noche las protestas de vecinos duraron tranquilamente 3 horas, ayer quizás más ya que se cortaron calles y la gente dejó sus portales para concentrarse en cruces de calles o parques.

La situación es confusa porque se ha derivado a un punto en el que lo que la mayoría de la gente quiere es que Erdogan dimita, algo que naturalmente no va a hacer, pero nadie se pregunta cómo y qué pasará luego. Pero realmente ¿por qué ha ocurrido todo esto?, ¿Cómo es ha llegado a este punto?. El 11 de mayo hubo un atentado en Reyhanli, localidad fronteriza con Siria, y murieron más de 50 personas. Sin embargo, a pesar de ser el atentado más sangriento y mortífero de la historia de la República de Turquía, éste  apenas se ha debatido y aún hoy en día mucha gente no sabe qué ha ocurrido realmente incluso no sabe que ha habido un atentado de esta magnitud. El gobierno prohibió hablar de Reyhanli a los medios y el Primer Ministro (ni él ni nadie del gobierno) no acudió a la zona para ver a los heridos y a los damnificados. Se empezó a detener gente en la zona donde viven muchos turcos-árabes alevíes (que protestan ante el radicalismo religioso de los grupos rebeldes que luchan contra Assad que reciben ayuda logística y militar de Turquía y de países europeos). Días después Erdoğan visitaba a Obama. Mientras en las televisiones turcas nos mostraban las flores y el ‘especial’ recibimiento que se encontró el ‘brillante’ Primer Ministro, apenas se informó al pueblo turco de qué se acordó en dicha cita pero mucho nos tememos de que una intervención armada en Siria o un apoyo mucho más formal a los yihadistas que luchan contra Assad y contra, es importante también especificarlo, los alevíes, fue acordado en secreto.

¿La gente protestó en Taksim por eso? Creo que aunque sí fue el principal motivo de algunos de los manifestantes hay muchas otros temas que también llevaron a la gente a las calles. Erdoğan tiene un poder absoluto desde hace ya unos años, se ha convertido en un líder autoritario desde que eliminó a la oposición (no solo política, sino también la de sectores del ejército, de los medios, jueces, etc.) Criticar a Erdoğan significa una pena económica, una pena de cárcel, un juicio, perder el trabajo, etc. Y con este tono autoritario este 2013 parece que ha empezado a tomar una serie de decisiones de forma acelerada que atentan contra la libertad de expresión, que excluyen de la vida social a gran parte de la gente que no es practicante y que atenta contra el estilo de vida de muchos turcos. Creo que es este cúmulo de decisiones tomadas en primera persona por el Primer Ministro (al menos así transmitidas en los medios por él mismo) y llevadas a cabo en muy poco tiempo lo que fue acumulándose en algún sitio y que explotó cuando la policía empezó a agredir a los acampados en Gezi, que en el fondo no eran más que cuatro pacifistas y ecologistas.

Ahora, todo es muy distinto. La verdad es que la protesta era totalmente apolítica en su origen. Y los jóvenes que resisten en Kizilay (Ankara) son en su mayoría universitarios o ex-universitarios que protestan por el autoritarismo de Erdoğan. Y les doy toda toda la razón. El problema está en que mucha gente que ha salido a las calles en Estambul, Ankara y otras ciudades también reivindican otras cosas. Hay sectores que le cantan a Atatürk y les encantaría un golpe de estado. De hecho, tras las modificaciones en el consumo y la venta de alcohol, Erdoğan dijo que si dos borrachos habían podido cambiar la constitución, nadie podría discutirle nada a él. Se refería a Atatürk y a İsmet İnönü. Eso encendió a muchos kemalistas que también salieron a la calle aprovechando la situación.

Otro punto es el tercer puente que empezó a construirse en el Bósforo. A pesar de que Erdoğan se opusiera enérgicamente a su construcción durante su mandato en los noventa como alcalde por el posteriormente ilegalizado partido islamista RP, ahora promociona en todo momento lo que será el puente más ancho del mundo. De forma absurda en los medios se discutió el nombre del puente, “Sultán Selim”, porque muchos alevíes manifestaron su desacuerdo al ser ese sultán, en su lucha contra el nuevo imperio chií safávida de Irán, el que había asesinado a gran número de seguidores del nuevo imperio iraní, de entre los cuales surgiría la rama de los alevíes turcos actuales. A mi parecer, el nombre del puente se debe más a otros aspectos como que el Sultán Selim fue el único que conquistó tierras hacia el este (olvidándose de la Europa cristiana) y que, tras su conquista de Egipto en 1517, se convirtió en el primer califa otomano. Pero la ceremonia de inauguración de las obras fue más polémica, aunque para variar eso tampoco se discutió en los medios. Fue una ceremonia religiosa en toda regla en la que el Muftí de Estambul dio por comienzo las obras.

La gente que el sábado acudió a la calle era muy variopinta. Junto los que protestaban por el autoritarismo de Erdoğan, a los que apoyo de todo corazón, estaban los que simplemente querían la dimisión de Erdoğan, los que pedían la vuelta del kemalismo, los que se quejaban contra las nuevas leyes sobre el alcohol y los que, simplemente, se apuntaban a un bombardeo y salían a romper cosas. En los medios aparecían imágenes de cristales rotos y tiendas dañadas como obra de los radicales. Aunque en muchos casos pudiera ser así, los cartuchos de gas (como demuestran fotos que he publicado en facebook) y la misma policía en su empeño de sacar a gente refugiada en lugares y tiendas también ha provocado destrozos considerables.

En Ankara, por ejemplo, la gente se juntó el viernes por la tarde en Kuğulu Park. Estuve allí y fue increíble porque vi a gente de todo tipo. Había banderas del partido comunista (TKP), del CHP, de Che Guevara y también familias con niños, gente sin afiliación ideológica o política ... Más tarde por la noche, cuando ya solo quedaban jóvenes, la policía empezó a cargar. La gente empezó a huir despavorida y se fue refugiando en locales. En el hotel Rixos entraron más de 200 personas con el permiso de las autoridades del hotel. Acto seguido, cerraron las puertas y el hotel esperó a que llegara la policía para entregar a todos los manifestantes. Del Rixos salieron más de 200 detenidos. Locales famosos en Ankara como el Leman cerró las puertas a la gente.

El sábado por la tarde-noche en Taksim la policía se retiró y la gente entró en masa. Lo que parecía ser una victoria creo que era más el intento de dar una imagen al mundo exterior de pacificación y de que el gobierno cedía ante su pueblo. Sin embargo, a unos 7 km de Taksim, en el barrio de Beşiktaş, la policía seguía cargando contra la gente y en ciudades como Ankara, sin apenas imágenes ofrecidas en los medios internacionales, había una carnicería.

¿Qué pasará a partir de ahora? La verdad, empieza a ser un poco preocupante porque nadie cede. Durante meses los universitarios se han ido manifestando en Ankara contra el gobierno pero la policía cerraba las salidas de los campus y gaseaba a cualquiera que intentase salir (yo mismo he tragado ese gas). Estas protestas eran controlables: los jóvenes encerrados en los campus, se hablaba mal de ellos en los medios y la sociedad los veía como un problema sin llegar a entender o a enterarse incluso de qué protestaban. Pero Taksim no ha sido así ya que los medios internacionales han captado esas imágenes y muchos turistas pudieron ver con sus propios ojos la brutalidad con la que la policía desalojaba a unas pocas personas. Luego se encendió la mecha.

El gobierno, de momento, tiene el control. De hecho Turquía se ha convertido en un estado policial desde hace ya unos años. Los aires democráticos del AKP, que ilusionaron en su primer mandato (2002-2007) a mucha gente que pensó que por fin Turquía podía dejar en el pasado el intransigente kemalismo y olvidarse de los golpes de estado, han pasado ya a la historia. El poder corrompe, será eso. Aquí no hay un problema de islamismo o de conflicto de creencias, sino que hay un problema de autoritarismo. Cuando observo cómo habla Erdoğan, gran orador y estratega, veo reflejado más bien a una versión musulmana de Putin, de Berlusconi o de, incluso, nuestro querido Aznar. La diferencia es que tiene un poder absoluto. Y un gran equipo que le respalda. Muestra de ello son las declaraciones de varios diputados y miembros del AKP estos últimos días por un medio que el Primer Ministro calificó ayer de plaga: el twitter. Por ejemplo, Mahmut Macit dijo que los ateos debían ser exterminados y colgados y Şamil Tayyar dijo que están protestando todos borrachos. El alcalde de Ankara, Melih Gökçek, descalificó con burla a los protestantes. La provocación, entonces, no es solo de los manifestantes. Erdoğan se reafirmó diciendo: “si vosotros juntáis a 100000 yo, así, sin más, junto a 1 millón, en eso no tengo ningún problema”.


Yo deseo que esto no se convierta en una lucha entre laicos y religiosos como desea el gobierno ya que no se trata en absoluto de eso. También deseo que no se venza la imagen de cuatro radicales-provocadores de izquierda que se intenta transmitir en los medios. El Primer Ministro ha eludido hablar de los verdaderos problemas, ha atacado a la oposición y en ningún momento ha mandado a la policía que baje los brazos. Parece que las protestas tienen que ser exterminadas por la fuerza hasta que los manifestantes se cansen (o se mueran). También desearía que no se comparara Taksim con Tahrir. Turquía es un estado democrático que está olvidándose de su democracia. Se ha iniciado, podríamos decir que de nuevo si miramos al pasado, un camino autoritario y Erdoğan se está convirtiendo en un déspota. Pero la mitad de la población electora lo votó en 2011. Entonces esto tendría que ser un aviso al Primer Ministro para que se conciencie de que gobierna sobre toda la población y que no puede hacer lo que le apetezca sin escuchar lo que la gente pide. En definitiva, que no es el dueño de Turquía pues me temo que es lo que él piensa tal como da a entender continuamente en sus comentarios en primera persona.


3 de junio, Ankara